El lomo de cerdo, también conocido en Galicia como “raxo”, es una buena fuente de proteínas y, al considerarse una carne magra, su contenido graso no es muy elevado con ácidos grasos insaturados, a los que se atribuyen propiedades cardiosaludables. Destaca su contenido en vitamina B1, que participa en el metabolismo de los hidratos de carbono entre otras funciones. El huevo frito que acompaña al lomo de cerdo, aporta proteínas de muy elevado valor biológico. La clara es la que aporta la mayor parte de proteínas del huevo. En la yema se concentra el aporte de grasas, en las que predominan los ácidos grasos insaturados, beneficiosos para el corazón y también el colesterol.