Este plato típico gallego se elabora como un guiso que va acompañado de garbanzos, chorizo y tocino principalmente. Los callos de ternera son un alimento rico en vitamina B5, que es necesaria para la asimilación de carbohidratos, proteínas y grasas, indispensables para la vida celular. Su alto contenido en hierro, hace que los callos de ternera ayuden a evitar la anemia por falta de hierro. Por otro lado los garbanzos aportan gran cantidad de proteínas, casi tanto como la carne, y también de hidratos de carbono, lo que los hace ser muy energéticos.