La caballa es un pescado azul, con un contenido graso elevado, pero se trata de ácidos grasos omega 3, que facilitan la disminución de colesterol y triglicéridos en la sangre y reducen el riesgo de padecer enfermedades coronarias. Entre las vitaminas que contiene la caballa, destacan la B12, importante para el metabolismo, ayuda a la formación de glóbulos rojos en la sangre y al mantenimiento del sistema nervioso central, y la B3 que beneficia al sistema circulatorio. Destaca también su alto aporte proteico, y como inconveniente su contenido en purinas, no la hace muy recomendable para personas que sufren gota.