La carne de cordero es muy apreciada, por ello se consume en numerosas celebraciones. Es fuente de proteínas de alto valor biológico. La carne de cordero se considera grasa, pero depende de la edad del animal, siendo el cordero lechal el que menos grasa contiene, y ésta es fácil de eliminar. Su contenido en colesterol es elevado, por lo que debe consumirse ocasionalmente. Destaca el aporte de hierro de fácil absorción, necesario para prevenir anemias.