El chipirón es rico en proteínas de alto valor biológico, pues contiene todos los aminoácidos esenciales. Posee un nivel de grasa muy bajo y apenas tiene hidratos de carbono, pero al cocinarlos rebozados y fritos en aceite su contenido calórico aumenta. También tienen una considerable cantidad de colesterol, por este motivo, no se aconseja su consumo a aquellas personas que tienen un nivel de colesterol elevado. Por su contenido en purinas, los chipirones están contraindicados en caso de hiperuricemia (gota). Son fuente de minerales calcio, fósforo y sodio y de vitaminas del complejo A y B.