La ensalada completa nos permite incorporar una gran variedad de verduras y hortalizas, cubriendo las necesidades diarias de vitaminas y minerales. La lechuga tiene un bajo contenido calórico, favorece la digestión y en general es beneficiosa para todo el aparato digestivo, además aporta calcio, magnesio, fósforo, potasio, sodio y hierro. El atún contiene grandes cantidades de ácidos grasos omega 3, buenos para el corazón, además de aportar proteínas y pocas calorías y grasas. Los espárragos y el maíz aportan fibra a la ensalada. El tomate es un buen antioxidante por su contenido en licopeno, además es rico en cobre y en potasio. La cebolla, por su contenido en compuestos azufrados, tiene poder bactericida.